Más de 218 kilómetros de costa con playas de aguas tranquilas y arenas suaves, más de 300 días de sol al año y un clima privilegiado han convertido este destino en un imán para millones de viajeros. El mar Mediterráneo, siempre apacible, invita al descanso y la desconexión.
El paisaje de la Costa Blanca es una combinación única de mar y montaña. Alicante es la segunda provincia más montañosa de España, con impresionantes sierras cubiertas de encinares, pinos y plantas aromáticas. Desde los valles con cultivos moriscos hasta los campos de palmeras en el sur, cada rincón ofrece una estampa inolvidable para senderistas y amantes de la naturaleza.
Nuestro territorio está salpicado de yacimientos arqueológicos que muestran la riqueza histórica de la región. Fenicios, cartagineses, romanos y musulmanes dejaron su huella en estas tierras. Entre castillos, pueblos con encanto y ciudades costeras, cada lugar tiene una historia que contar. La gastronomía y los vinos locales completan esta experiencia única.
El paisaje de la Costa Blanca es una combinación única de mar y montaña. Alicante es la segunda provincia más montañosa de España, con impresionantes sierras cubiertas de encinares, pinos y plantas aromáticas. Desde los valles con cultivos moriscos hasta los campos de palmeras en el sur, cada rincón ofrece una estampa inolvidable para senderistas y amantes de la naturaleza.